La respuesta a la pregunta de nuestro título es que las pantallas son uno de los ingredientes principales de la miopía, pero no el único. Ya sea por trabajo o por ocio, cada vez más personas pasan gran parte del día con los ojos puestos sobre una pantalla. La corta distancia a la que nos situamos del móvil o del ordenador, hace que nuestros ojos se vean sometidos a un sobreesfuerzo, poniendo en jaque nuestra salud visual. Miopía, fatiga ocular o sequedad son solo algunos de los problemas que se pueden desarrollar por esta práctica.
¿Cómo afectan las pantallas a nuestra vista?
Algunos de los problemas más comunes que puede provocar una excesiva exposición a las pantallas son:
- Incremento de la miopía: En los últimos años, se estima que los casos de miopía tanto en adultos como en niños, han aumentado un 50 %. Esto es debido al sobreesfuerzo al que sometemos a nuestros ojos para enfocar un objeto tan cerca durante demasiado tiempo. El aumento de uso de pantallas y visión próxima, junto con la disminución de actividades al aire libre y los factores genéticos, son las causas de este incremento.
- Fatiga ocular: Los síntomas de la fatiga ocular son, entre otros, visión borrosa, dolor de cabeza, etc. Estos se deben a que nuestro cerebro está constantemente alerta tratando de interpretar y anticipar todo lo que se presenta en la pantalla.
- Blefaritis: Se trata de una inflamación que afecta a ambos párpados y puede provocar, además, picor e irritación.
- Sequedar ocular: En una situación normal, el ojo humano parpadea cada 8 segundos. En cambio, frente a una pantalla los ojos pueden permanecer abiertos hasta 30 segundos. Este es otro efecto de la gran actividad del cerebro en estas situaciones y que provoca que nuestros ojos se resequen más de lo normal y tengan mayor dificultad para enfocar los objetos.
¿Cómo prevenir la miopía producida por pantallas?
Existen una serie de precauciones que deberías tomar si, como muchos, pasas muchas horas delante de una pantalla. ¡Toma nota!
La regla de los 20-20-20. Esta consiste en, cada 20 minutos desviar la mirada de la pantalla y, durante 20 segundos, mantener la vista fija sobre un objeto que se encuentre a 20 metros de distancia. De esta forma darás a tus ojos un descanso.
Parpadea y cierra y abre tus ojos de forma voluntaria de vez en cuando para evitar la sequedad ocular.
Coloca la pantalla del ordenador a una altura inferior a la de tus ojos y evita que las fuentes de luz natural produzcan reflejos en ella.
Mantén una buena postura al estar sentado, ya que esta afecta al rendimiento visual.
En cuanto a los más pequeños, para disminuir la influencia de las pantallas en el aumento de la miopía infantil, lo recomendable es retrasar todo lo que podamos el acceso a móviles, tablets u ordenadores, y lo más importante pasar tiempo al aire libre. En países como Canadá esto se tiene tan en cuenta que se llega a recetar por escrito.
Si tu hijo tiene ya miopía hoy en día hay varias opciones de corrección especial para ralentizar su aumento, como son las lentes de contacto, la atropina y las terapias orto-k, entre otros.
Y recuerda, que para mantener una buena salud visual deber acudir a tu óptica de confianza y realizar una graduación de la vista de forma periódica.